Nació en Buenos Aires en 1949. En su trayectoria se pueden distinguir tres capítulos claramente reconocibles y a la vez integrados por un eje muy explícito, el de la estética de la movilidad. Existen tres formas de contemplar sus obras, que en definitiva se juntan, en torno al leitmotiv de la movilidad. El primer momento comprende a las vinculadas con los temas de la inmigración. El segundo tramo es a partir de su participación en la Bienal de Arte de Venecia en 1997, donde presentó su gran plato y cubiertos, López Armentía innovó el soporte de sus obras, reemplazando las telas. Comenzó a utilizar polvo de cuarzo y mármol aglutinados con poliéster. Aunque a veces todavía pinta sobre tela, el uso de este nuevo material, fue decisivo en su representación y con él dibuja, pinta con óleo, hace inclusiones y relieves. En la tercera etapa, no excluyente sino integradora, lo lleva a investigar la movilidad como hecho cultural. La problemática de la movilidad, sobre la que se efectuó una Bienal intercultural en Amsterdam. Obtuvo el Segundo Premio en el Salón de Santa Fe en 1982, Primer Premio en el Salón del Instituto Cultural y Científico Israelí en 1983, Premio Artista Joven de la Asociación Argentina de Críticos de Arte en 1984, Gran Premio en la Primera Bienal de Pintura Iberoamericana de Miami en 1986, Medalla de Oro en la Bienal Latinoamericana de Arte Sobre Papel de la Asociación Argentina de Críticos de Arte en 1986, Mención de Honor en el Salón Nacional en 1987, Primer Premio en el Salón Premio MANLIBA en 1989, Primer Premio en el Salón Hoechst en el Arte en 1991, Tercer Premio en la Bienal Iberoamericana de Arte del Instituto Domecq de México en 1994, Medalla de Plata del Premio Gunther en 1987 y Medalla de Oro del Centro de Arte y Comunicación en 1986.