Escultura

Valdez, Nélida

Buenos Aires
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Nació en Mar del Plata el 21 de marzo de 1946. Profesora de Escultura y Dibujo y Profesora Superior de Escultura egresada de la Escuela Municipal de Artes Visuales Martín Malharro en 1967 y 1970. Entre sus profesores destacan Juan Carlos Aragón, José Alonso, Juan Carlos García Palou, Jorge Lezama, Eliseo Speroni y Jorge Giménez. Pintó telones para escenarios, creó muñecos de tela, afiches con serigrafía, premios, trofeos para festivales internacionales de cine, cerámicas, material didáctico en madera y otros objetos. Ejerció la docencia en las escuelas de Artes Visuales Martín Malharro, Hipólito Yrigoyen, Juan Martín de Pueyrredón, Jorge Newbery y Albert Schweitzer de Mar del Plata. Concurrió al Salón Nacional desde 1969. Premiada nacional e internacionalmente por sus obras relacionadas con los derechos humanos. Obtuvo Segunda Mención en el Concurso Nacional para el Monumento a Azucena Villaflor en 2009 y Madres de Plaza de Mayo, Mar del Plata en 2002, Primer Premio Monumento Escultórico a los Derechos Humanos en Salzano, Venecia en 2000. Otros monumentos: en 1994 en Protesta por la Contaminación; A la Familia y Monumento Havanna en 1968 en Mar del Plata. Sus inicios fueron con el arte cinético y óptico en 1965, pinturas, grabados y objetos; obras de mucha luz, color y movimiento. “Avanzando los 70 y en los 80 siendo otra realidad social lo expresó de maneras muy diferentes, desarrollando la escultura, el grabado y la fotografía. Elige la técnica y materiales de acuerdo a lo que quiere expresar. Debe nacer de un complemento, donde se da al mismo tiempo el pensamiento, la intuición, la percepción y el sentimiento. Y todo este sentir interior lo traduce en imagen, color y forma, creando una obra. Todos los materiales le han sido pródigos en su labor, desde la madera a la piedra, desde el metal al cemento. Asume para sus obras la fundición en bronce. Correquevuela es una transustanciación de materia sólida que puede sugerir el salto. Una concepción que, más allá de su acuerdo expresivo primitividad, humor, y realismo, puede registrar en su carnadura metálica metáforas del más puro onirismo”. (Jorge M Taverna Irigoyen. Arte al Día).